Síndrome del Cuidador
Se define como un cansancio emocional que incapacita al cuidador para ofrecer la ayuda que necesita el paciente hasta el punto de llegar a sentir indiferencia por él.
Los primeros síntomas son:
1. Aislarse de los amigos, familiares y otras personas queridas. 2. Pérdida de interés por aquellas actividades con las que antes disfrutaba. 3. Sentirse triste, sin esperanza y desamparado. 4. Cambios en el apetito y en el peso. 5. Cambios en los patrones del sueño. 6. Más facilidad para caer enfermo. 7. Deseos de hacerse daño o de hacérselo a la persona que cuida. 8. Agotamiento emocional o físico. 9. Irritabilidad.
El agotamiento físico y mental que puede llevar a producir esta tarea. Los cuidadores, a menudo, están tan ocupados con la labor de cuidar a una persona que descuidan su propia salud emocional, física y espiritual.
-Otros factores que pueden llevar hasta este estado de agotamiento:
1. Expectativas poco realistas. Hay que cuidadores que esperan que su familiar mejore por el hecho de que ellos le están proporcionando los mejores cuidados.
2. Falta de control. Tener dificultades económicas y de recursos o fallar en la planificación, gestión y organización de las actividades que conlleva el hecho de cuidar, lo que puede provocar una fuerte frustración en el cuidador.
3. Algunos cuidadores se imponen cargas irrazonables, concentrando todo el peso de esta responsabilidad.
4. Otros factores. Muchos cuidadores no son conscientes del desgaste que implica su labor y, finalmente, se agotan.