La importancia de la vitamina D
La importancia de la vitamina D en el ser humano ha evolucionado en los últimos años, pasando de un nutrimento esencial de la dieta involucrado en el metabolismo del calcio y el fósforo a un sistema hormonal esteroideo complejo que participa en procesos autócrinos, parácrinos y endócrinos distintos a los relacionados con el metabolismo óseo.
La vitamina D participa en la modulación de procesos inflamatorios y mecanismos de diferenciación, maduración y supervivencia en varios sistemas celulares que se encuentran íntimamente relacionados con los procesos de envejecimiento y en la etiopatogenia de síndromes geriátricos como la sarcopenia, las fracturas y las caídas.
METABOLISMO DE LA VITAMINA D
La vitamina D es una hormona estoreoidea que existe en dos formas: el ergocalciferol, derivado del ergosterol obtenido de los vegetales, y el colecalciferol, que es producido de forma endógena por la transformación mediada por la radiación ultravioleta del 7,8 dihídrocolesterol localizado en la epidermis. La vitamina D (D3), al ser una molécula lipofílica, requiere ser transportada por la proteína transportadora de vitamina D al hígado y riñón para su activación.
En un primer paso, la vitamina D es transformada por el citocromo P450 CYP2R1 hepático en 25 (OH) D3; ésta es transportada al riñón, donde es convertida por la alfa 1 hidroxilasa en la 1,25 (OH)2 D3, la forma activa de la vitamina. La 1,25 (OH)2 D3 producida por el riñón está destinada principalmente a las funciones endócrinas de la vitamina D, sobre todo en el metabolismo del calcio y el fósforo que involucra al hueso, intestino, paratiroides y riñón. Por otra parte, tejidos como la próstata, el músculo estriado, las células del sistema inmunológico, entre otros, cuentan con alfa 1 hidroxilasa en su citosol que utilizan para la producción de la vitamina D requerida en sus procesos autócrinos y parácrinos.
Para realizar sus acciones, la vitamina D cuenta con dos familias de receptores. El receptor de vitamina D clásico se encuentra localizado en el núcleo celular y actúa como promotor o represor de sus ligandos específicos en el ADN.
Las familias del segundo tipo se localizan en la membrana celular y realizan sus funciones mediante la formación de segundos mensajeros intracelulares y son responsables de las acciones rápidas de la vitamina D. Cambios en el metabolismo de la vitamina D asociados
al envejecimiento: Las personas de 70 años o más presentan una disminución cercana a 70% en la producción de vitamina D como consecuencia de la reducción del 7,8 dihídrocolesterol epidérmico, la cual se encuentra asociada a la disminución en la exposición solar indispensable para su biotransformación.
En modelos animales, se ha demostrado una reducción en la expresión de los receptores de vitamina D en hueso e intestino, mientras que en el ser humano se ha observado una disminución en su expresión en duodeno, riñón y músculo.